Opiniones

"El Periódico digital para el sur de Córdoba"

Ohdiosas

Basta con que Ana Patricia Moya esté detrás de un trabajo, una actividad, una participación o cualquier otra cosa para tener la seguridad de que vale la pena, de que no defrauda, de que lo ha hecho con todo el ser. Lo escribo porque puedo dar fe de ello, ya que he tenido la suerte de coincidir y de compartir con ella varios proyectos que, por lo general, terminan, porque no se tiene la capacidad económica, mediática o empresarial que las circunstancias actuales de la literatura le obligan a poseer.

Esta vez ha sido Elena Román quien ha realizado con ella la antología Ohdiosas (Ediciones Raro, 2023), cuyas páginas recogen a veinte poetas que tienen más de cuarenta años, pues todas nacen en los años 60 y 70, a excepción de Begoña Abad y de Alejandra Vanessa. Además de estas dos, la nómina se completa con Ada Menéndez, Alicia Es. Martínez Juan, Almudena López Molina, Ana Elena Pena, Ana Pérez Cañamares, Ana Vega, Carmen Camacho, Carmen del Río Bravo, Eva Vaz, Inma Luna, Itziar Mínguez Arnáiz, Julia Navas Moreno, María Eloy-García, María Jesús Fuentes, María Monjas Carro, Roxana Popelka, Sonia San Román y Txus García; a las que hay que añadir a las autoras del prólogo y epílogo, Marisol Sánchez e Isabel Bono, respectivamente.

No sé si hago bien en confesar que solamente conocía a la mitad de ellas, aunque también considero que uno de los objetivos de toda selección o antología es la de descubrir voces o nombres a quien la lea. Del mismo modo, aunque hallamos distintos estilos, casi de manera personal, la sensación de que se tratan los temas de un modo similar permanece tras la lectura completa de la selección.

Tampoco sé si hago bien en no extraer versos de todas las poetas, si bien he de admitir que los siguientes son a los que he vuelto al terminar la lectura.

Los textos de Ada Menéndez podrían servir como una buena declaración de intenciones de Ohdiosas:

Pidamos alojamiento en el cumpleaños feliz,
Que nos encierren en el backstage de Grease.
[...] Rayemos el mejor disco de la colección.
Fundemos la VISA perdiendo al blackcjack.
Eliminemos tildes en esdrújulas.

Tanto estos versos, que pertenecen a «De lunes a viernes», como los del resto, especialmente, los de «Cry Baby» (La tristeza me vuelve egoísta,/una egoísta muy/muy hermosa) son una verdadera invitación a la antología.

Me ha emocionado «Como nadie creyó nunca en mí, yo me creí», un magnífico ejercicio de la fuerza de voluntad poética de Begoña Abad:

Cuanto menos me creen, cuanto menos creen
que la tierra es cosa seria y que somos solamente eso,
[...] más me creo yo, más huelo a tierra,
a río y a árbol y más brotes me nacen
entre palabra y palabra.

Es evidente que el orden de las poetas se ha sucedido alfabéticamente según su nombre de pila. Eso hace que sea Txus García la encargada de cerrar la obra, ¡y de qué modo! «Panspermia», «Mama», «El día en que dejaron de acentuarse monosílabos y mayúsculas» y «Señoras de antes» son el broche de oro para Ohdiosas. El último, «Señoras de antes», es una inteligente y novedosa manera de manifestar el amor:

Como las señoras de antes
esquivamos maridos,
inventamos mil excusas,
amamos la clandestinidad,
la sombra
y los hoteles.
 
Como las señoras de antes
y en silencio,
moriremos
de amor.
Qué pena, Mari.

Confío en que la calidad de estas tres poetas haga sospechar de la del resto. En caso de que no le haya convencido, es preciso recordar que también están los versos de Alejandra Vanessa («Este vientre inútil nunca será un hogar»), Alicia Es. Martínez («Vivir contra la poesía/pero vivir al menos»), Almudena López Molina («No hay horizonte,/solo llegada y  encuentro»), Ana Elena Pena («Tan perfecta como un cuadro torcido»), Ana Pérez Cañamares («Las palabras son bajas de una guerra/que perdemos cada día contra el mundo»), Ana Vega («Conciencia en llamas/que ha de quemar/y alcanzar al otro»), Carmen Camacho («El Mañana/no es ningún día/de la semana»), Carmen del Río Bravo («hecha polvo/haciendo polvo/golpeando como una hostia en la cara»), Eva Vaz («¿Cómo contarte que no me dejo sola/porque me aterra este gesto de mandíbula?»), Inma Luna («Cualquier pared con vocación de grieta/me hace guiños»), Itziar Mínguez («internarse/en tu palidez/sin marcas»), Julia Navas («de planificar un atraco para volver a estar a tu lado»), María Eloy-García («Hemos sido abril todo el tiempo posible»), María Jesús Fuentes («No podré añorar lo que no tuve»), María Monjas («que vivir era esto/imaginar y contarnos»), Roxane Popelka («hablo de desasosiego/no te hablo de geografía») y Sonia San Román («Yo resisto en presentes imperfectos,/porque adoro jugar en los desvanes»).

Termino, y no sé si es correcto, afirmando que no hay duda de que son todas igual de Ohdiosas, motivo por el que hay que felicitar a Elena Román y a Ana Patricia Moya. Como dije al comienzo, es una selección que vale la pena, que no defrauda y que está hecha con todo el ser.