Opiniones

"El Periódico digital para el sur de Córdoba"

¿Justicia?

Llevamos unas semanitas que nos inundan con noticias referidas a casos judiciales y pocas son las personas que no manifiestan su perplejidad. No por la cantidad, sino por la calidad de las sentencias o por las acciones de los actores judiciales.

Empecemos por esto último, resulta que el fiscal superior de Murcia, López Bernal, que ejercía su trabajo defendiendo lo público, es decir, lo de todos, y que iba en contra del Presidente de la comunidad murciana, el investigado señor Sánchez (PP), es cesado en su cargo por obra y gracia del Fiscal general, es decir, de las altas esferas políticas. Y sí, digo políticas porque desde el momento y hora que el Fiscal general es nombrado por el gobierno, esto se convierte en política y se mezcla con la supuesta independencia judicial. López Bernal no se ha callado y ha dicho claramente las presiones que muchos fiscales sufren, algo que más de uno nos imaginábamos y no había que ser ninguna lumbrera para ello. Rajoy, por ser el de más arriba, o más bien su súbdito Catalá, ministro que no me ha gustado nunca y del que seguro vamos a seguir conociendo muchas perlas, se han encargado de ir despejándole el terreno a Pedro Antonio Sánchez que tanto se jacta de ser inocente, y que de serlo no entiendo que necesite ayuda de nadie para salir de rositas. ¿Somos iguales ante la Ley?

Luego leemos que un rapero mallorquín conocido como Valtonyc ha sido condenado por los delitos de enaltecimiento del terrorismo, calumnias e injurias graves a la Corona y amenazas por el contenido de las letras de algunas de sus canciones. ¿Y cuánto le ha caído? Pues tres años y medio de cárcel. Da la sensación que la Ley mordaza ha influido en los jueces al dictar este tipo de penas y de qué manera. Ojo, yo he leído las letras a las que se refiere la condena y desde luego que no es para darle la enhorabuena al sujeto en cuestión, censurables son sin ningún lugar a dudas, pero me parece excesivo el castigo puesto que no deja de ser pasar la línea de la libertad de expresión. Burlarse hasta de la muerte de Miguel Ángel Blanco es intolerable, y decir “Mataré a Esperanza Aguirre, pero antes la haré ver cómo su hijo vive entre ratas”, o “Ni tú ni nadie me hará cambiar de opinión, cabrón, fusilaré al Borbón” no me parece muy edificante, todo lo contrario, me da un asco inmenso, como lo de “Mutilaré a De Cospedal”. En fin, no sigo, pero hay muchas más frases de este corte, y me pregunto, ¿hasta dónde piensa este bestia que puede decir lo que le plazca? ¿Gente así es la que debería de gobernarnos con Iglesias? (digo esto porque parece que fue el superlíder de Podemos quien le encargó la “canción”). Y a la vez me surge la interrogante: ¿tres años y medio por la cancioncita?

Y es que te pones a comparar y te entra una mala leche que te hace decir, no que la Justicia es un cachondeo, sino lo siguiente. Que le pongan una fianza a Griñán de más de 4 millones de euros y a Urdangarín 200 mil no tiene lógica alguna. Los criterios para fijar fianzas, así como la petición de penas es de lo más dispar, supongo que dependiendo de quiénes la solicitan y de quiénes sean los que la tengan que cumplir. No voy a meterme en embrollos de derecho, bastante tienen los que los sufren a diario, tanto trabajadores de justicia en general como los implicados en algún conflicto, pero no me puedo callar el decir que parece mentira que toda la Justicia esté tan involucionada, ahora se empieza a ver el uso informático para mayor agilidad, aunque aún a años luz de la realidad, con lo que sigue pareciendo que los juzgados son decimonónicos con la cara lavada.

Y claro que voy a hablar del caso Noos, faltaría más, donde hemos tenido que ver cómo el fiscal acusaba a la mujer de Diego Torres y sin embargo no lo hacía con la de Urdangarín. Mire usted qué curioso, las dos firmaban los papeles y las dos se enriquecieron con las tropelías de sus maridos, que sí, que la de Torres además trabajaba para la trama, pero la diferencia cuál es, pues está meridianamente clara, que una es una españolita de sangre roja y la otra tiene sangre azul. Y Urdangarín puede vivir fuera de España y su exsocio no puede salir del país. Difícil de entender por no decir otra cosa. ¿Que somos iguales ante la Ley?

Y luego los de las tarjetas Black, o sea, esos caradura que pensaban que podían gastar a diestro y siniestro sin declararlo a Hacienda, gentes de la diestra y de la siniestra política sin escrúpulos que por pertenecer a un Consejo de una Caja pensaban que podían despilfarrar el dinero de los contribuyentes. ¿Qué penas se han pedido para ellos? Parece que según el gasto que habían hecho, pero por término medio menos de lo que le piden al rapero indeseable. Y ayer mismo nos enteramos que Blesa y Rato, condenados a seis y cuatro años y medio, respectivamente, no entran en prisión y no se les impone ninguna medida cautelar. ¿Esto cómo se digiere en la sociedad?

Y no quiero aburrir hablando de la Gürtel, de los EREs y de todos los casos mediáticos de corrupción, ni de la Justicia para los “menores”, sería tedioso y me subiría mucho la tensión, así que voy a terminar con algo más cotidiano. En muchas noticias que se insertan en este medio y que tratan de la Guardia Civil o de la Policía en relación al apresamiento de distintos delincuentes comunes, se añade eso de que son conocidos por sus amplios antecedentes penales. Pues bien, otro más para el saco, esa es la cuestión, dicho en plata, que está muy bien que las fuerzas del orden los atrapen, pero lo malo malísimo es que por una puerta del juzgado entren y por la misma salgan como si tal cosa. ¿Cuántas fechorías tienen que hacer para que les pase algo? Con estos delincuentes parece que la Justicia en España sale baratísima, igual que sale barata con violadores y asesinos. No así con el rapero maleducado. Ni con aquella pobre mujer que por plantar berzas para comer en un terreno del Ministerio de Obras Públicas fue multada con 90.000 ptas. de las de antes, y eso que la pobre señora vivía de la beneficencia.  ¿Dónde está la Justicia?

De los jueces qué decir, parece que de estos profesionales no se puede decir nada, pero eso es un error, de estos los hay como en todas las profesiones, buenos, malos y regulares, y se puede hablar de ellos como se habla de cualquier otro ciudadano. Que yo sepa, y perdonen la expresión, los jueces no mean colonia. Y dicen aplicar la Ley, bueno, vale, pero como ésta es interpretable algunos hacen unas lecturas que “baje Dios y las vea”.

Es mejor un mal arreglo que un buen pleito, dicho común que hace alejarse de entrar en el meollo judicial y quedarse en los soportales. Sabio el pueblo y pobre la Justicia que además de ciega se olvidó de pesar bien con su balanza.