Opiniones

"El Periódico digital para el sur de Córdoba"

Lo efímero

¿Recuerdan los tiempos en los que tras 40 años de servicio lo jubilaban a uno con una ruidosa comida y un reloj de oro...? Aquello pasó.

Hoy, en dos semanas hemos tenido dos Presidentes del Gobierno, dos ministros de Cultura y Dos seleccionadores nacionales de fútbol. Mucho cambio. Eso sí, finalmente Urdangarín irá a la cárcel: solo la justicia permanece a su ritmo, lento pero implacable.

Uno no es que sea muy moderno (solo leo libros de papel por el momento), pero estoy mas o menos al tanto de las nuevas tecnologías, que sin duda, en gran medida, condicionan el ritmo de las cosas. 
Las redes sociales y en general Internet, generan una inmediatez en las noticias y en los personajes que las protagonizan, que escasamente un mes después de la aparición de cualquier personaje público, este está mas que “achicharrado” por la continua cascada de informaciones, ya sean estas del ámbito profesional o personal, que se suceden en los medios. Se entra en la valoración de cualquier aspecto con una soltura y gratuidad, dignas de mayor reflexión, pero claro la meditación requiere tiempo, y al parecer de eso, no tenemos mucho.

La carrera por ser Presidente del Gobierno, entrenador del Real Madrid o Ministro de Cultura genera una inmediatez que hacen inoportunas las dudas sobre porque y cuando, a cada una de esas dignas pero apresuradas pretensiones. La sensación de que todo debe ser pronto y alcanzando los máximos niveles, se ha instalado en nuestras vidas, por lo que no concebimos que una enfermedad, una frustración, un trabajo o incluso, un matrimonio, sean para toda la vida.

Negarse al futuro es tan estúpido como inútil. Dicho esto, no obstante, seria de agradecer algo mas de pausa, de control sobre las situaciones y sobre todo, medir el resultado a medio y largo plazo de nuestras decisiones, sobre todo las importantes, aquellas que determinarán en gran medida nuestro devenir en el tiempo. Esta reflexión, llevado al ámbito público es aún de mayor calado: Todo lo que decidan nuestros representantes públicos, para bien o para mal, nos terminará afectando a todos.

Por favor: diez minutos de sofá y meditación antes de salir al inevitable e irreversible escaparate de las redes.