Opiniones

"El Periódico digital para el sur de Córdoba"

Manual del nuevo antifascista

Para ser un buen antifascista es completamente necesario, en principio, no haber visto un fascista en tu vida. Ni de lejos.

Y no te hace falta porque podrás reconocer fácilmente a todos los fascistas: llevan una bandera española en el coche; o la cuelgan en su balcón; o la ondean por la calle.

No importa si el fascista peligrosamente armado con la bandera no lanza consignas fascistas; se le suponen. Duro con ellos. Hay una excepción a esto, y es cuando alguien porta la bandera para quemarla, pues aquí nos encontramos con un auténtico antifascista: un hermano.

Además de una bandera últimamente al fascista se le puede ver armado de una cacerola con la que hace ruido; ruido abiertamente fascista. En estos casos es necesario defenderse, siendo muy de antifascistas golpear en la cabeza a quien golpea una cazuela.

Exige al Estado educación gratuita y libertad de expresión que te sirva para ejercer tu inalienable derecho antifascista de insultar a quien se manifieste con banderas y cacerolas. Procura tú llevar una bandera de la democrática Unión Soviética, para que nadie dude de que eres un antifascista que siempre has respetado los derechos humanos.

Además, exige siempre respeto y comprensión mientras te defiendes de esta manera, porque tus emociones antifascistas son el mejor argumento. Muéstrate sorprendido y dolido si no se te entiende. Busca una cámara y quéjate.

Compañero antifascista, no cejes nunca en la lucha diaria también por abolir el Estado, pero ten cuidado de no pasarte no vaya a ser que te quiten la ayuda, el subsidio o la renta mínima vital. Hemos luchado mucho para conseguir este beneficio cristalinamente antifascista. Pide que suban los impuestos por el mismo motivo; y recuerda: los impuestos los pagan los trabajadores del sistema capitalista. Nunca los va a pagar uno de los nuestros porque un antifascista no debe participar en ese tipo de trabajo por principios antifascistas irrenunciables.

Protesta contra la Unión Europea por capitalista, pero pídele ayudas para paliar la pandemia y mantener las ayudas sociales (releer párrafo anterior).

En el ámbito de la cooperación entre fuerzas antifascistas has de plantear y firmar acuerdos con fuerzas plenamente antifascistas, como por ejemplo… BILDU. Lo de marcar casas ya se lo dejamos a ellos; total, todavía no han marcado ninguna de un judío ¿no?, sólo de fascistas.

Prepárate para levantarte en armas si es necesario, pero no antes de mediodía porque hay que dormir lo suficiente.

Que no te importe realizar escraches a fascistas estén embarazadas o no, al tiempo de protestar si los escraches se los hacen a un antifascista. Un antifascista es una antifascista siempre: no por tener un chalé de lujo y que su sueldo quintuplique el salario base deja de ser antifascista y proletario. ¡Es importante recordar esto porque los fascistas nos quieren confundir y no queremos que pase!

No protestes, sin embargo, si mueren 30.000 compatriotas cuando gobierne el antifascismo; pero llora si fallece un perro cuando gobierne el fascista. Hay que otorgarle a la vida animal el justo valor que sin duda merece.

Si eres mujer es importante que profeses abiertamente el feminismo, pero que vistas y actúes como hombre. Que seas muy masculina es lo mejor para ser buena antifascista.

Y por último, no te esmeres mucho en tu aspecto, corte de pelo e higiene personal, pues un antifascista invierte toda su energía en ser sólo un buen antifascista.

¡A POR LA VICTORIA (cerveza), SIEMPRE!