Opiniones

"El Periódico digital para el sur de Córdoba"

Cotilleando

Alec Baldwin no es culpable, pero los Estados Unidos de América sí. Y es que esta gente sigue viviendo como en el “Far West”. Tienen tan arraigado lo del colt-45 y la estrellita de sheriff, que se les agotó el remedio definitivamente y se encuentran inmersos en una espiral de consecuencias imprevisibles y a las que no se les presta la más mínima atención. A lo sumo, titulares y titulares de condolencia repletos de hipocresía, florecitas y velas en el lugar del suceso y al día siguiente más de lo mismo.

Anda, anda… Y la tienen catalogada, también entre sus mismos compañeros, como la llorona de los platós televisivos…. Es que la envidia es mu mala, amigos. Tertuliana fina y guapa donde las haya, sabiendo estar en todo momento y largando lo justo y con la debida corrección, Lydia Lozano acaba de recibir el galardón de mejor colaboradora de televisión en los Premios Aquí TV celebrados recientemente.

Eugenia Martínez de Irujo, ilustradora de papelería ahora, asevera acerca de su marido: “Narcís es una gozada de hombre”. Ahí lo dejo.

¡Ea! Ya estamos dentro de lo que algunos estudiosos denominan: “la generación muda”. Que según leo, muchos jóvenes y jóvenas prefieren interactuar con el whatsapp antes que hacer o atender una llamada telefónica. He de decir que un servidor también lo hace, y tengo una edad, ya que considero que ponerse a hablar por teléfono, sobre todo con familiares, es meterse en un laberinto donde el repaso a las vidas de los interlocutores puede durar del orden de una o dos horas, por lo menos. Y no hay derecho, caramba. Que la vida es muy corta y se van los minutos y los segundos en un santiamén, y el cafelito de Colombia que tenías sobre el escritorio ya perdió todo su sabor y la inspiración se hartó de esperar y se largó por donde había venido. Con lo cómodo y rápido que resulta enviar un emoticono alusivo o el sticker adecuado a la persona en cuestión.

Que ya puestos, y metiéndome en lo que no me importa, hago mención del Arrocet. Porque cuando Edmundo se sincera, hasta los cimientos de ese grupo tan mediático de góspel que tenemos en España, “Las Campos”, se resquebrajan debido a la cantidad de cartuchos explosivos con que el chileno quiere, de una vez por todas, limpiar su irresistible imagen de conquistador de señoras. A ver, yo ni entro ni salgo en el mencionado asunto, mas no saben ustedes la penita que me da observar la forma en que está acabando su pedazo de carrera una de las periodistas más emblemáticas de este país: ahijada María Teresa de mi querido y admirado tocayo y paisano, Jesús Hermida.