La Lupa

"El Periódico digital para el sur de Córdoba"

La pintura al pastel es como decir Ángel de Cáceres

ENTREVISTA. En esta ocasión surdecordoba.com, con un espítitu claramente cultural, tratará de dar a conocer a sus lectores la obra de un pintor que sorprenderá a muchos por su peculiar obra, que viene marcada por una técnica muy depurada con el pastel para conseguir un realismo mágico, lleno de sensaciones lumínicas que logran un color de una viveza extraordinaria sobre un fondo oscuro. Eso, unido a sus temáticas mitológicas y a la mujer como transmisora de emociones, es más que suficiente para entender que estamos ante un artista con una enorme personalidad y una sensible espiritualidad.

Sur de Córdoba – Para situar a nuestros lectores, ¿quién es Ángel de Cáceres García?

Ángel de Cáceres García – Soy pintor, nací en Córdoba y me he criado en Sanlúcar La Mayor (Sevilla) donde resido, licenciado en BB. AA. por la especialidad de “Pintura” y por la Universidad de Sevilla. Desde hace años me dedico casi con exclusividad a trabajar la técnica del pastel sobre papel.

SdC – ¿Desde cuándo te diste cuenta que lo tuyo eran las Bellas Artes?

ÁdCG – No lo sé. Siempre he sentido la necesidad de proyectar ideas, escenas y sentimientos a través de las artes plásticas. Personalmente, creo que es algo innato. Se pueden aprender técnicas, procedimientos o métodos de trabajo, pero esa necesidad de crear, de aportar algo nuevo y de querer transmitirlo hacia los demás, forma parte del propio individuo.

SdC – ¿Qué nos podrías contar de tu etapa como estudiante universitario?

ÁdCG – En general fue una de las etapas más ilusionantes de mi vida. Conocí a grandísimas personas e hice algunas de las mejores amistades que aún conservo. La Universidad, sin duda, constituye un proceso esencial en nuestra formación, aunque debo decir que la Facultad de Bellas Artes nunca puede ser “el canal” exacto para la forja de un artista, pues, como explicaba anteriormente, determinadas cualidades ya se tienen (o no) antes de matricularse allí; otra cuestión es trivializar el necesario periodo de aprendizaje de quien pueda llegar a ser un artista en activo. En mi opinión, fueron (y siguen siendo) muchas las lagunas formativas y quizás, para quienes pretendan expresarse con solvencia de estilo, sería muy beneficioso recuperar la enseñanza del oficio de pintor, escultor, etc.

SdC – Ángel, ¿sólo te has dedicado a la pintura profesionalmente o has trabajado en algo más?

ÁdCG – He sido profesor de Enseñanza Secundaria (antiguo Bachillerato) durante nueve años.

SdC – ¿Has seguido siempre una línea fija en tu estilo pictórico, incluyendo la técnica al pastel que tan magistralmente usas?

ÁdCG – Empecé a trabajar el pastel varios años después de terminar la carrera, y lo hice porque era una técnica a la que tenía miedo, me parecía un riesgo “innecesario” mientras tuviese a mano el óleo y los pinceles, pero uno de esos riesgos que sabes que vas a correr tarde o temprano. Es cierto que nadie me enseñó a trabajarla (tampoco en la Facultad) y que la valoraba insuficientemente; consideraba que no era posible conseguir grandes efectos de luz con un material tan “apagado” como el pastel, además de las exigencias que conlleva en cuanto al uso del color y del dibujo. Fue un experimento sobre papel gris oscuro lo que me animó a romper esos miedos y, después de un período de experimentación con fondos y temas diversos, terminé optando por el uso del papel negro.

SdC – Cuéntanos brevemente en qué consiste tu etapa creativa actual

ÁdCG – Estoy centrado en la elaboración de varias series temáticas que tienen como referente la figura femenina. Hay cuadros de contenido alegórico, mitológico o literario, sin olvidar la profundización en el estudio del retrato.

SdC – Ángel, ¿nos puedes contar cómo se forja un cuadro tuyo desde el papel en blanco hasta el remate final y la firma?

ÁdCG – El procedimiento habitual es muy simple, al comienzo, y muy complejo al final. Sobre papel negro uniforme, con textura notable (papel Canson Mi-Teintes), elaboro el dibujo de contornos de la figura y a continuación comienzo la fase de color/volumen/luz realizando una red de trazos que sirven de base a todo el trabajo. Es importante insistir en que si estos dos primeros pasos no se han resuelto bien, nada de lo siguiente funcionará pues las posibilidades de rectificar en el pastel son muy escasas. Aunque lo recomendado en muchos manuales sea difuminar, algo que ciertamente ofrece ventajas a la hora fundir tonos, yo no utilizo ese recurso y siempre busco que el trazado permanezca visible (al estilo del “restregado” en la pintura al óleo) persiguiendo que los colores se valoren por superposición, nunca por difuminado. En las fases de aplicación del color, suelo manejar tres tipos de formatos de pastel: el pastel de barra (más blando y saturado que el resto), generalmente en las primeras “capas”; el pastel de barra cuadrangular (más dura que la anterior y de tonos menos intensos), que facilita la fijación del pastel de base; por último, si se desea un acabado más cubriente, y también cuando se requieren toques de precisión, los lápices pastel.

SdC – Se aprecia en tu obra actual un estilo propio, y eso no se ve a menudo, ¿eres consciente de que tus pasteles alcanzan una técnica altísima y de que tu visión pictórica es muy cautivadora?

ÁdCG –En cuanto a lo primero, soy consciente de que trabajo para que así sea alguna vez. Sobre lo segundo, el espectador es quien debe valorar esos aspectos.

SdC – En la pintura de Ángel de Cáceres se observa que la mujer es protagonista de la obra, ¿por qué?

ÁdCG – Me resulta muy difícil explicar esto. Yo mismo me hago esa pregunta a menudo y casi siempre llego a conclusiones parecidas: las cualidades estéticas del cuerpo femenino, sus armonías, la ancestral, y cierta, sensibilidad de sus gestos y poses, quizás sean la fuente de inspiración más adecuada para los contenidos de mis cuadros.

SdC – ¿Trabajas con modelos al natural o a través de la fotografía?

ÁdCG – Realizo sesiones fotográficas con modelos reales y después trabajo, ya en el estudio, partiendo de las imágenes.

SdC – ¿A quién o quiénes admiras en la historia del arte como pintores?

ÁdCG – Muchos. Creo que en la cadena de la pintura todos los eslabones son imprescindibles. Siempre he admirado por su técnica magistral a Rembrandt y a Velázquez (también por la  naturalidad que consigue en sus obras), a Leonardo, Caravaggio… a otros más “recientes”, por sus “avances” y sus “luchas”, como Van Gogh, Klimt, Modigliani…

SdC – ¿Te inspiras en alguno de los grandes maestros para hacer tu obra?

ÁdCG – No soy consciente de ello. Es probable que haya un poco de cada uno de los citados en la respuesta anterior, pero siempre como influencia natural.

SdC – Después de lo que estás haciendo actualmente, ¿tienes ya en mente otros proyectos?

ÁdCG – Sí. Cada vez que emprendo un proyecto, sé que ello me ocupará varios años. Por esta razón suelo llevar varios proyectos a la vez, alternando de uno a otro para reactivar las ideas y mantener la tensión que necesito al trabajar en todos ellos.

SdC – Saliéndonos de lo puramente plástico, ¿cómo has llevado el tema de exponer?

ÁdCG – Los últimos tres años he estado al margen de esa cuestión. Los he dedicado a completar la primera de las series que emprendí, dedicada al tiempo, a las mediciones que hacemos de su transcurrir (los días de la semana, las cuatro estaciones, momentos del día…), y es ahora cuando vuelvo a tener la posibilidad de exponer, y de hacerlo en muestras y salas que ofrecen buenas condiciones en todos los sentidos. Por ejemplo, en septiembre expongo en Gijón en una muestra nacional “Cultur3 Club”. También tendré otra en Boadilla del Monte (Madrid), y espero que pronto llegue la que preparo para mi Córdoba natal. Hay por ahí también algún proyecto para fuera de nuestras fronteras, pero no está cerrado y prefiero no decir nada.

SdC – El mundo del arte se sabe que es un círculo bastante cerrado donde cuesta trabajo entrar. ¿Tú crees que ya has entrado en él o crees que sigues yendo por libre?

ÁdCG – Me gustaría entrar en el mundo del Arte, algo que solo se consigue en el propio estudio. Otra cosa es el mercado artístico; ahí, salvo alguna excepción,  sí es muy difícil entrar, por las razones que sea. De todas formas, no creo que haya que desvirtuar ninguno de los dos ámbitos: el Arte es el Arte, y el negocio es negocio.

SdC – ¿Te gustaría que un galerista te cogiera y te impulsara para que te conociera más gente?

ÁdCG – Me entusiasma muchísimo que mi trabajo pueda llegar a las personas,  considero que son las receptoras de lo que hago. Cuando un galerista apuesta por ello se trata de una ayuda incuestionable.

SdC – ¿Internet y las redes sociales han sido un buen escaparate para Ángel de Cáceres?

ÁdCG – Sí, lo son, sin duda. Además, ofrecen la oportunidad de conocer opiniones e intercambiar ideas con personas de todo el mundo.

SdC – Si algún lector quisiera contactar contigo porque estuviera interesado en tu obra, ¿cómo lo podría hacer?

ÁdCG – Cualquier persona puede contactar conmigo a través de mi correo electrónico (angeldecaceres@gmail,com), o localizarme por mi nombre, tanto en Internet (sitios como Tumblr, Google+,  Worpress, Artelista, Virtual Gallery, Pinterest…), como en Facebook, donde igualmente cuento con una página en activo (Ángel de Cáceres García. Artista)

SdC – Ángel, para surdecordoba.com ha sido un placer entrevistarte y conocer un poco mejor tu singular obra pictórica. Esperamos poder verla algún día por estas tierras… Gracias por tu atención a nuestro medio.

ÁdCG – El placer es mío. Muchas gracias a vosotros y espero que la cita sea factible por esas tierras maravillosas. Un abrazo.