La Lupa

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Fátima Gálvez: "Mi gran objetivo siempre es dar lo máximo de mí"

Fotos cedidas por Fátima Gálvez

ENTREVISTA.TIRO. 23 años tenía la baenense Fátima Gálvez cuando en 2010 se colgaba su primera medalla al cuello. En aquella ocasión, en la ciudad rusa de Kazán, la baenense más universal lograba una medalla de bronce en la modalidad de foso por equipos. Desde entonces, los resultados en forma de medalla no hicieron otra cosa que crecer y todo ello se vio coronado el pasado mes de septiembre con la medalla de oro en el Mundial celebrado en Lonato (Italia). Teníamos la ocasión de hablar con ella para hablar de su trayectoria y de sus más inmediatos objetivos.

P. Cinco años han pasado desde que lograbas tu primera medalla. Un bronce en el Europeo de Kazán a la que le han seguido muchos otros logros. ¿Qué recuerdos te quedan de aquella primera medalla?

R. Pues a pesar de ser junior, porque en aquella competición yo participaba como junior, se puede considerar que fue el inicio de mi etapa ya como competidora en categoría absoluta de cara a poder conseguir la plaza olímpica. Aquello confirmó que, dentro de mis inicios, podía alcanzar el nivel de los demás.

P. Para llegar a ello, muchos años de sacrificio y de entrenamiento. ¿Cuándo recuerda Fátima Gálvez sus primeros tiros?

R. Pues comencé cuando con unos ocho años me iba al campo con mi padre y me dejaba la escopeta, aunque ya a tomármelo en serio y empezar a participar en competiciones fue a la edad de once años. Al principio, aunque fuese un deporte, yo me lo tomaba como un juego pero lo hacía muy en serio ya que me gustaba bastante y quería mejorar para poder dar el máximo en las competiciones y conseguir títulos.

P. Cuando la mayoría de tus allegados, en aquellos años, te veían practicar tiro mientras ellos practicaban otros deportes más populares, ¿qué te decían?

R. Recuerdo que tenía once, catorce años, y estaba cursando la ESO, la gente me miraba como si fuese una extraña. Por un lado, tenía amigos y profesores que se alegraban, pero por otro, había a quien no le gustaba que yo tirase. Notaba mucho rechazo por ser un deporte que no se conocía mucho por aquel entonces e incluso, no te voy a decir envidia, pero sí que parecía que había ciertos celos por destacar en un deporte. Sin embargo, los tiempos han cambiado por suerte, el deporte del tiro se conoce mucho más y sobre todo a raíz de los títulos que he logrado en los últimos años parece que está mucho mejor mirado.

P. El camino hacia esa primera medalla debió ser bastante largo y no precisamente una alfombra roja, ¿no es así?

R. La verdad es que sí porque los comienzos fueron como grises. Había gente que decía “¿el tiro al plato? ¿Ese qué deporte es? Qué deporte más raro haces”. La mente de la gente no estaba muy abierta y lo consideraban un deporte de hombres. Además, como bien dices, ha sido un camino muy largo porque conlleva mucho sacrificio, de dejar de salir con las amigas, conlleva el perderme comuniones o bodas de sobrinos u otros familiares por tener que obtener los mejores resultados posibles en los campeonatos que participaba… Lo importante es que el fruto se ha visto recompensado.

P. Desde aquella medalla en tierras rusas han pasado ya cinco años como decíamos al principio. ¿En qué cambiado Fátima Gálvez desde entonces deportivamente?

R. Más que cambiar, me he hecho más mayor y he adquirido experiencia. A base de observar mucho a los grandes equipos y de competir bastante, he sabido corregir y rectificar los errores que cometía.  He seguido sacrificándome y esforzándome al máximo para estar entre las mejores y nunca he tirado la toalla, sino que como yo suelo decir, la toalla sólo la utilizo para secarme el sudor y seguir trabajando, ya que es la única manera de conseguir una meta. Cuando te marcas una meta como yo hice cuando empecé a competir, si abandonas, yo entiendo que has fracasado.

P. Desde entonces, excepto en 2013, todos los años te has acabado colgando alguna medalla al cuello. Dos en Europeos, tres en Mundiales y una más en los Juegos Europeos de este año. ¿Sería muy difícil quedarse con alguna, teniendo en cuenta que cada una tendrá un significado?

R. Todo el mundo me hace la misma pregunta y a todos les respondo lo mismo: no me quedo con ninguna porque todas tienen un significado diferente y todas llevan detrás un trabajo y un sacrificio diferente. Cada campeonato es diferente y en todos ellos hay que solventar dificultades diferentes y obstáculos que te encuentras a lo largo de la competición. Todas son importantes por igual y no destaco ninguna por encima de otra, aunque si tuviese que quedarme con alguna, lo haría con la del año pasado cuando fui subcampeona del mundo porque fue la primera vez que mi padre pudo estar presente viéndome competir en un campeonato internacional. Aunque no gané el oro, me quedo con esa medalla porque mi padre me pudo acompañar.

P. De las siete medallas logradas en esas competiciones, cuatro de ellas han sido en la modalidad de foso individual y tres han sido por equipos. En este tipo de competiciones, ¿cuándo te sientes con mayor responsabilidad, en la prueba por equipos o en la individual?

R. A diferencia de otras competiciones, nosotras competimos de forma individual, y cuando se termina la competición es cuando se mira cómo ha quedado la clasificación por equipos. Es decir, que aunque debiera hacerse así, no hay un campeonato por equipos como tal en el que se pueda considerar que tiramos las tres contra las tres rivales que nos toquen por sorteo, de ahí que la importancia que le damos a una medalla por equipos, que no sabemos si la tenemos hasta el final del campeonato, no es igual a la que tiene si la logras de forma individual. Yo al menos, cuando voy a competir, lo hago pensando de forma individual y el último día de competición es cuando vemos si por equipos también tenemos medalla.

P. Aunque en aquella ocasión no hubo medalla, sí que obtuviste un diploma olímpico en los JJOO de Londres 2012. ¿Cómo es la experiencia de participar en el mayor acontecimiento deportivo de cuantos hay en el mundo?

R. Pues cuando me clasifiqué me puse evidentemente muy contenta porque cualquier deportista quiere clasificarse para unos JJOO. Todo el mundo dice que es lo máximo que un deportista puede alcanzar, sobre todo si ganas una medalla, y les doy la razón a todos los deportistas que lo comentan. Sí que es verdad que tiene mucha importancia a nivel mediático, pero al final no deja de ser un campeonato más en el que puedes ganar o perder. Con todo, es verdad que es una gran forma de ver recompensado el trabajo que haces con la participación en ellos y la vivencia es espectacular. Compartir aquello con deportistas de élite mundial como Usain Bolt, Pau Gasol, Rafa Nadal, los jugadores de la NBA… te hacer ver que eres buena en tu deporte. Hasta que no lo vives no te lo crees porque es impensable.

P. Y vivir todo eso con un diploma olímpico bajo el brazo, debe ser inolvidable…

R. Siempre he dicho que conseguir un diploma olímpico con los recursos que teníamos por aquel entonces es más que satisfactorio. Yo terminé mi carrera ese año, no dejé de estudiar porque quería sacarla adelante… y todo ello lo tuve que compaginar con los entrenamientos, las competiciones… Si después de todas esas dificultades logras medalla en todas las competiciones en las que participas y encima te alzas con un diploma olímpico, pues es lo más. Lo importante es dar lo máximo de ti y tratar de entrar en la final para poder superar el diploma y pelear por las medallas.

P. Centrándonos en 2015, al año en cuanto a los resultados de las pruebas en las que te han dejado estar no se le puede pedir más…

R. La verdad es que no. Como siempre digo, he dado lo máximo de mí y he hecho todo lo que estaba a mi alcance. Salvo las dos primeras puntuables para la Copa del Mundo en las que tuve problemas con los entrenamientos y no pude conseguir una buena clasificación en ellas, en las demás las cosas me han salido bien, he conseguido buenos resultados, he estado en porcentajes fuera de las marcas mínimas que te exige la Federación para estar dentro del equipo, y luego en los Juegos Europeos, en la final de la Copa del Mundo de Chipre y en el Mundial disparé súper bien gracias a que entrené más fuerte que nunca, y sobre todo me voy con la satisfacción de que llevo una buena preparación de cara a los Juegos de Río.

P. Decimos en las que te han dejado estar por si hay alguien que no sepa que la Federación, en lugar de mirar por ti, te dejó fuera del Europeo de Eslovenia sin motivo justificado…

R. Así es. El motivo no estaba justificado porque en ninguna de las normativas de la Federación se exige que para estar en un Europeo debas participar anteriormente en el Campeonato de España, que fue en el que me ausenté por voluntad propia ya que no es obligatorio estar. Debido a esto, me echaron del grupo de alta competición, no pude participar en el Campeonato de Europa, bajé posiciones en el ranking mundial y tampoco pude estar en la Copa del Mundo de Dubai. Todo ello, además, me afectó de cara a la preparación para el Mundial ya que era muy importante estar en esas pruebas sobre todo de cara a templar nervios. Cuanto más compites, más tranquila vas, menos errores cometes, ves dónde fallas para tratar de mejorar… Toda esa presión psicológica por la lucha constante contra la Federación por esos malentendidos no es ni mucho menos buena, y la culpa no fue mía sino de ellos, que me excluyeron del grupo de alta competición por exigir los honorarios que me corresponden tanto a mí como a mi entrenador, el italiano Luca di Mari.

P. Lo más curioso del caso, al menos visto desde fuera, es que parece ser que la Federación actuó contra tus intereses parece ser que por despecho, ¿no es así?

R. Es la impresión que te da. Uno de los motivos que esgrimieron fue que querían conseguir la segunda plaza olímpica en mi categoría, cosa curiosa que lo planteasen así porque a mi compañera Sonia Franquet, con la que me llevo estupendamente y que consiguió la plaza olímpica también tras el Mundial del año pasado, también deberían haberla dejado entonces en casa para que las otras compañeras de pistola consiguiesen su plaza olímpica. Pareció una especie de reproche cuando yo sólo pedía lo que era de justicia.

P. Para la Federación, dejar fuera de un Europeo a una de sus mejores bazas, ¿no es tirar piedras contra su propio tejado?

R. Es la sensación que da cuando te quedas sin participar en una gran competición por decisión de la Federación tras haber sido una de las primeras deportistas en lograr la plaza olímpica a nivel nacional, no sólo ya dentro de mi deporte. Sonia Franquet y yo lo conseguimos en el Mundial de Granada del año pasado y se supone que la Federación tendría que mimarnos y cuidarnos tanto física como técnica y psicológicamente para que lleguemos en las mejores condiciones a los JJOO.

P. Polémicas aparte, y ya que estamos acabando 2015 y llegando a 2016, ¿cómo marcha la preparación para esta nueva temporada?

R. Pues desde que vine de la última prueba de la Copa del Mundo, la verdad es que la preparación técnica, el tiro en sí, lo tengo un poco en reposo por así decirlo, y lo que sí llevo preparando fuerte desde hace aproximadamente un mes es el físico porque el año que se me presenta va a ser muy exigente sobre todo a ese nivel y también a nivel psicológico. Aunque la competición estrella de 2016 son los JJOO, hay antes otras competiciones en las que voy a participar y hay que darlo todo también porque una buena clasificación es esencial de cara a Río. A partir de Enero, entablaré algo más de contacto con el arma, con la escopeta, e incrementaré los entrenamientos de forma progresiva hasta Río. La programación será muy similar a la de 2015.

P. Una preparación que imagino irá enfocada casi totalmente a los JJOO de Río 2016, ¿no es así?

R. La preparación es más o menos similar a la de años anteriores porque las competiciones son casi las mismas, con el añadido de los JJOO. Sí que es cierto que en la primera prueba de la Copa del Mundo, que se celebra en Chipre, no participo por decisión del entrenador para ir progresivamente tomando contacto con la competición y llegar a Río en las mejores condiciones.

P. ¿En qué competiciones estarás presente antes del próximo verano?

R. Pues voy a participar en la Copa del Mundo de Brasil, que se celebrará poco antes de los JJOO, en las Copas del Mundo de San Marino y Bakú, tendremos el Campeonato de Europa de Italia, que será la última prueba importante antes de los JJOO, más otras dos competiciones a un nivel inferior que también serán en Italia. A todo ello, hay que añadirle obviamente las competiciones nacionales.

P. Aunque irás con los pies en el suelo, ¿el objetivo es la medalla?

R. Cuando fui a los JJOO de Londres pensaba lo mismo que ahora: lo importante es dar lo máximo de mí misma independientemente del resultado que se consiga. Al final los JJOO son una prueba extraña, porque se celebra solamente cada cuatro años y todas queremos hacerlo bien y vamos con muchos nervios. Si consigo medalla será porque he trabajado lo justo y necesario para conseguirla, y si no la consigo, al menos venirme de Río con la sensación de que he dado lo máximo para estar en la final y luchar por ella. Al final si no la logramos, pues tendremos que mirar a qué se ha debido para seguir mejorando y lograrlo en otra ocasión. El objetivo es estar en la final, y dentro de ella, luchar por las medallas.

P. Si consigues esa ansiada medalla olímpica, ¿pensarás en probar otras modalidades dentro del tiro o tratarás de ampliar tu palmarés en foso olímpico?

R. No, no me planteo competir dentro de otras modalidades. Cuando acaben los JJOO y vea en qué posición termino, me haré la misma pregunta que me hago siempre, que es ver hasta dónde he llegado y ver qué presupuesto tengo en base a las becas de ADO, ayudas de Federaciones y demás porque también dependo mucho de mi trabajo. Por ahora vamos a centrarnos en este año y posteriormente ya veremos.

P. Por último, con motivo de la III Feria de la Perdiz con Reclamo de Cabra, vas a recibir un homenaje. ¿Qué opinión te merece teniendo en cuenta que como se suele decir, no se suele ser profeta en su tierra?

R. La verdad es que estoy muy contenta, ya que todo lo que sea recibir homenajes en base a lo que has logrado en tu carrera deportiva viene a poner en valor lo que haces. Hace poco también me entregaron un premio en Córdoba y yo suelo decir que esto es como sacar un sobresaliente en un examen. Para mí es un aliciente que demuestra que este 2015 ha sido un buen año y que me da ánimos de cara a mejorar en 2016 para sacar una matrícula de honor en los JJOO. Esto me motiva y me ayuda a seguir trabajando.