VIVIENDA. Según la información ofrecida por el alcalde, Fernando Priego, un total de 46 familias, pensionistas, dependientes y personas con discapacidad tendrán la oportunidad de adaptar sus viviendas a sus circunstancias físicas, por medio de dos líneas de ayuda, una para realizar cambios en los platos de ducha, anchura de las puertas, eliminación de barreras arquitectónicas, etc., y otra para ayudas técnicas como la adquisición de materiales y dispositivos como colchones anti escaras, barras de transferencia, grúas, etc., medidas que, en definitiva, sirvan para mejorar su calidad de vida.

Existe una tercera línea de ayudas, de carácter extraordinario, que se destina al pago de las obras o instalaciones de vivienda habitual permanente, en casos de catástrofe o siniestro, que en esta ocasión ha quedado desierta.

De las 49 solicitudes presentadas se han aprobado 46, 41 por un importe de 1.000 euros cada una para mejoras en la vivienda habitual y 5 de 500 euros cada una para ayudas técnicas, con un importe total de 43.500 euros.

Desde mañana día 12 las personas beneficiarias pueden pasar por la Oficina Técnica del Ayuntamiento para gestionar los trámites oportunos, ya que por motivo de la pandemia se ha suspendido el acto que se venía realizando en los últimos años.

Para el alcalde, “lo que más nos ilusiona y motiva de nuestro trabajo es hacer política útil que mejore la vida de las personas y estas ayudas son un ejemplo”.