Opiniones

"El Periódico digital para el sur de Córdoba"

¿Quiénes son mujeres?

En el Twitter de Ca La Dona, un espacio de difusión y reflexión sobre feminismo, de Barcelona, se subió un cartel de una convocatoria de asamblea. Rezaba este en letras grandes: «4a Assemblea General 8M 2020»; y, justo abajo, con otra tipografía, menos grande y menos resaltada: «convocatòria oberta a dones, lesbianes i trans». El resto del cartel era la indicación de la fecha y el lugar, junto con unas ilustraciones del pelo, gafas y brazos de cuatro mujeres, estos cogidos en cadena uno con otro.

Espero que quien lea estas líneas no me salte con aquello de que está en catalán, una lengua peninsular y, según su historia, tan española como el castellano. Lo digo, porque fijarse en el idioma sería crear una cortina de humo para no detenerse en lo importante: la convocatoria es para mujeres, pero en el mismo renglón se añade que también es para lesbianas y para trans. Sí, yo también me lo pregunto: ¿las lesbianas no son mujeres? Parece que nadie en aquel espacio de feminismo se ha percatado de que ese cartel está relacionando «dones» con heterosexuales únicamente ¿O es que las «lesbianes» son un tipo concreto de «dones»? Quizá haya que hilar más fino: ¿se está insinuando que las lesbianas no se comprometen tanto en el 8M? Sinceramente, el cartel me parece una gran metedura de pata.

También lo es, y no para menos, lo de señalar a las trans o mujeres transgénero. Parece insinuarse que, si en la convocatoria se hubiera indicado que es para mujeres (solamente), las trans no se sentirían aludidas. Pero su identidad es la de mujer, no sé si me explico.

Traigo este cartel no para menospreciarlo (cualquier acto en pos de la igualdad y el feminismo no me disgusta), sino para reflexionar, sobre todo, porque el feminismo tendría que haber superado ya esto de diferenciar a las mujeres por ideología, religión o sexualidad. Un espacio feminista no lo es si deja entrever que las mujeres pueden etiquetarse, si manifiesta quiénes lo son y quiénes no, o cómo han de ser.

La frase de invitación de la convocatoria es incoherente con la simbólica ilustración del cartel: cuatro figuras representan a las mujeres, con la única diferencia del peinado (o las gafas, que parece decir que no importa cómo seas ni la edad que se tenga) y la forma de vestir. Esa imagen habla por sí sola: la unión de las mujeres. No hay referencias visuales de lesbianismo o de trans en ella, simplemente porque no es necesario. Todas son mujeres y, por ello, la convocatoria debería ser abierta para todas, sin señalar a unas más que a otras.