Córdoba

En total la Policía ha detenido a 6 personas en la que consideraban una de las organizaciones más importantes en la introducción de hachís en nuestra provincia.

Agentes de Cuerpo Nacional de Policía de Córdoba,  en la segunda fase de la operación “CABALLO DE TROYA “ han procedido a la detención de tres personas de nacionalidad marroquí y una española, acusadas de sendos delitos contra la salud pública y alguno por infracción a la ley de extranjería al encontrarse en situación irregular en España, siendo éstas:

1.- A.K., de 25 años de edad2.- I.B., de 22 años de edad3.- A.L.M., de 23 años de edad4.- O.B.L., de 35 años de edad

Desde hace aproximadamente un año, los miembros del grupo de Estupefacientes del Cuerpo Nacional de Policía, tenían la sospecha de que una organización itinerante compuesta en su mayor parte por personas de origen árabe, se dedicaba a la introducción de grandes cantidades de hachís en Córdoba, distribuyéndolo posteriormente entre varios cordobeses que lo ponían inmediatamente a la venta en nuestras calles a jóvenes.

A raíz de estas sospechas se estableció la correspondiente operación policial que en un principio consistió en controlar a estos cordobeses para detectar las posibles ventas de droga y establecer los métodos que usaban.

Una vez se consiguió identificarlos mediante las vigilancias a las que fueron sometidos, se pudo observar como efectivamente, en parques públicos y domicilios particulares se dedicaban a la venta tanto de hachís como de marihuana a las personas que acudían al lugar a abastecerse de estas sustancias.

Fruto de estas vigilancias efectuadas, se consiguió igualmente identificar a los súbditos marroquíes que les suministraban la droga, logrando así los efectivos policiales subir un escalón en la organización investigada, llegando incluso a identificar al cabecilla de esta red de tráfico de drogas, que correspondía a las iniciales de A.K..

Una vez que los actuantes tuvieron pruebas suficientes de la actividad delictiva llevaron a cabo la primera fase de la operación, donde se detuvieron a 2 personas, y se efectuaron dos registros domiciliarios en los que se intervienen un revolver del calibre 38 y una pistola, cien bellotas de hachís y cuatro kilogramos de  marihuana ya seca y dispuesta para su venta al menudeo, así como tres basculas de precisión y bolsas de autocierre donde eran dispuestas las dosis que vendían. Igualmente lograron desmantelar un invernadero provisto de todos los elementos necesarios para el desarrollo de plantas de marihuana en la terraza de la vivienda, el cual contaba con extractores, aparatos para la humedad y calor necesarios, líquidos de crecimiento, etc. así como unas 300 plantas en fase temprana de de crecimiento.

En dicha primera fase los agentes incautaron tres aparatos de radio-transmisión, utilizados presumiblemente para avisar de la presencia policial en la zona y no ser descubiertos realizando las ventas de droga. 

Como quiera que los funcionarios policiales no dieron por cerrada la operación, centraron sus investigaciones en los presuntos abastecedores de droga, personas de origen árabe.

Por lo que la pasada semana tras comprobar como acudía la pareja sentimental de uno de ellos, mujer de nacionalidad española, a uno de los pisos que usaba este entramado para guardar y ocultar la sustancia estupefaciente, para salir a los pocos minutos portando una mochila e introducirse en un vehículo, todo ello de forma precipitada, hizo saltar la alarma entre los investigadores sobre que la organización hubiera recibido una cantidad importante de hachis por lo que optaron por poner en conocimiento de la autoridad judicial lo sucedido para solicitar la entrada y registro  del mencionado piso, tras la cual se constató como en el mismo no habitaba persona alguna, siendo utilizado para albergar una plantación de interior de marihuana provista de la totalidad de instrumentos necesarios en el que se intervinieron numerosas plantas de grandes dimensiones que arrojaron un peso aproximadamente de ocho kilogramos y medio, y ocultar alrededor de 500 bellotas de hachís, un tetrabrik repleto de éstas, y mil cien gramos de la misma sustancia dispuesto en placas, así como una balanza de precisión, varios útiles para la preparación de la venta y documentación diversa que está siendo analizada.

Paralelamente, se solicitó el registro de otra vivienda utilizada por los ahora detenidos donde fueron halladas otras cien bellotas de hachís ocultas en una de las habitaciones.

Igualmente se realizó un tercer registro, concretamente del domicilio utilizado por el máximo responsable de la organización, donde se logró intervenir unos 12.000 euros aproximadamente en efectivo. Así mismo, varias “muestras“ de bellotas que presumiblemente usaban para demostrar la calidad de la droga cuando se entrevistaban con nuevos vendedores a los que querían suministrar la sustancia estupefacientes. Interviniéndose así mismo, cinco radiocassettes con pantallas de video y dos etapas de potencia, los cuales están siendo objeto de estudio para determinar su procedencia.

La totalidad de la droga intervenida, una vez vendida en el mercado ilícito, hubiera reportado a esta organización unas ganancias de aproximadamente 75.000 euros.

Los detenidos fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial, la cual decretó la prisión provisional a la espera de juicio del máximo responsable del entramado y de su lugarteniente. Todos los detenidos cuentan con antecedentes policiales anteriores por tráfico de drogas.