BALONCESTO. CABRA. Dentro del trabajo tanto formativo como competitivo que viene realizando el CDB Cabra en los últimos meses, destaca sobremanera el papel que está llevando a cabo en esta temporada el equipo de la categoría Mini Masculino A, que no conoce la derrota a lo largo de toda la temporada oficial y al que, además, le cabe el honor de haber aportado a la selección andaluza a los dos únicos jugadores cordobeses de esta categoría formativa. Con su entrenador, Rafael Orgaz, que además ejerce como vicepresidente del club, manteníamos la siguiente entrevista.

P. Son tres los equipos que te ha tocado dirigir en la presente temporada. ¿Cómo se sobrelleva esto?

R. Pues la verdad es que se sobrelleva echando muchas horas, porque no hay otra manera de hacerlo. Para estar presente en todos los entrenamientos, se necesitan muchas horas y, obviamente, hay que apoyarse también en alguien, y ahí es donde juega un papel fundamental el gran grupo humano que me acompaña en los distintos equipos y que nos sirve como apoyo a todos los entrenadores principales.

P. Sin esta ayuda adicional de los entrenadores ayudantes, obviamente sería más difícil…

R. Sin ellos, sería imposible llevar adelante este trabajo, y por ello hay que indicar quiénes son. En el equipo mini tengo la ayuda de Ángel Serena, que lleva dos años, y Javier Moñiz, que se incorporó esta temporada ya que sabíamos que iba a ser un año complicado. En la categoría peque, cuento con la colaboración de dos de los chavales que juegan en la categoría junior, como Rafa Borrallo y Antonio Trujillo, así como con el padre de uno de los chavales que estoy entrenando, que por su larga trayectoria en el extinto Club Baloncesto Egabrense, es alguien idóneo para echarme una mano con estos pequeñajos, ya que además es diplomado en Magisterio y sabe perfectamente el trato que hay que tener con los chavales de estas edades, ya que es encantador y les da el cariño que necesitan. Por último, en el equipo baby, está casi al frente ya, porque no puedo asistir tanto como quisiera, mi pareja, Mari Carmen Moreno, acompañado también de otra persona que nos viene ayudando desde hace tres años como es Alicia Rodríguez.

P. Parece, de esta manera, que comienza a calar hondo entre los jugadores de los distintos equipos, el hecho de hacer al mismo tiempo sus pinitos como entrenadores…

R. Nosotros lo que intentamos transmitirles, desde bien temprano, nuestra pasión por el baloncesto, y dentro de esa pasión, el sentimiento de un escudo que sea nuestro, de ellos, y que se encuentre identificado con nuestra ciudad. La verdad es que en este sentido, gracias al trabajo que comenzamos a hacer con el club hace cuatro años, esto está dando sus frutos porque ya tenemos varios chavales que están como ayudantes en las categorías más pequeñas y, al mismo tiempo, juegan en las categorías superiores del club.

P. Muestra de ese sentimiento, son actos como los que organizasteis este año durante vuestra presentación, en la que hicisteis partícipes a antiguos jugadores y entrenadores del club…

R. Sí, aunque la verdad es que no pudimos contar con la presencia que nos hubiera gustado por parte de jugadores y directivos de etapas pasadas por temas laborales, pero lo realmente importante es que los que pudieron venir comprobaron en lo que se ha convertido este gran e ilusionante proyecto que comenzó hace cuatro años.

P. Bajo tu punto de vista, ¿esperabas que el club llegase a donde ha llegado después de estar disgregado cuándo vosotros comenzasteis con el proyecto? ¿Dónde crees que está la base en la que os habéis asentado para llegar hasta aquí, dentro de que esperáis seguir creciendo?

R. La base no es otra que el trabajo diario y la consistencia con la que los diversos entrenadores estamos al pie del cañón con los niños. Para mí esos son los dos pilares fundamentales de este proyecto, que comenzó hace cuatro años y al que yo me agregué gracias al actual presidente, Miguel Aguilar, y a su sucesor, Fran Jiménez, ya que fueron ellos los que plasmaron la idea fundamental de lo que se quería trabajar, así como la línea de trabajo a seguir. A día de hoy, creo que se puede decir que esta línea de trabajo es la que nos está dando tantos éxitos como hemos cosechado.

P. ¿Cuál consideras que es la principal diferencia entre un entrenamiento de los que haces con el equipo baby, y uno de los entrenamientos que se hacen con el mini?

R. Son entrenamientos totalmente diferentes, ya que empezando por la edad, no tiene nada que ver un grupo con el otro. En el caso del equipo baby, por ejemplo, el 80% del entrenamiento se basa en la psicomotricidad y en empezar a que conozcan este mundo que nos apasiona y que es el del baloncesto, sin insistir en ningún momento en fundamentos técnicos ni tácticos. En la categoría peque, por ejemplo, hablamos de otro nivel, ya que es una edad que considero que es clave para iniciarse en el baloncesto. La comprenden niños de entre seis y ocho años y en ella comenzamos a introducir conceptos individuales con los niños que luego nos servirán para no perder tiempo en categorías superiores como la de Minibasket, que es la edad en la que se empezaba antes. Esto hace que, cuando el niño llegue a la edad de nueve o diez años, tenga adquirida una buena base que nos permite a los entrenadores trabajar en la pista cuestiones más tácticas, más técnicas y como equipo.

P. De hecho, tan buena base lleváis en el Minibasket que no hay por ahora quien os hinque el diente…

R. Cierto (risas). En la provincia de Córdoba, a día de hoy, no ha habido ningún rival que nos haya podido vencer, pero sí que es verdad que en las pasadas Navidades realizamos un gira por tierras malagueñas y jugamos también un torneo en Linares, donde nos enfrentamos a equipos de un altísimo nivel, y ahí sí que perdimos un amistoso. No es nada oficial, pero sí que hay que decir que caímos una vez (risas). De hecho, cuando yo comencé con este grupo de chavales a trabajar hace tres años, tenía claro que el objetivo debía de ser el de meternos en un sector a nivel autonómico, y el año para lograrlo era este. Es algo que, a una edad tan temprana, no se consigue en Cabra desde hace muchísimo tiempo, y vamos en el buen camino para conseguirlo. Creo recordar que a finales de los noventa o primeros de este siglo, se llegó también a dicho sector con un equipo en categoría Minibasket.

P. ¿Cómo se lleva que en una convocatoria de la selección andaluza de esta categoría sólo haya dos jugadores y ambos pertenezcan a este club?

R. Pues imagínate, es un gran honor para nosotros. Supone una enorme satisfacción saber que están en la lista final para jugar el Campeonato de España, y no sólo Teddy Y Pablo, sino otros dos compañeros suyos, han tenido la suerte también de pertenecer a la selección que jugó el Campeonato de Andalucía de Provincias en el que consiguieron la medalla de bronce siendo pilares fundamentales de la selección provincial. Llevábamos varios años en los que en Córdoba no se conseguían estos resultados en la categoría de Minibasket y estamos, por tanto, muy satisfechos.

P. ¿En qué fecha se va a disputar ese Campeonato de España?

R. Pues en una fecha complicada sobre todo para los padres (risas), ya que comenzará el Domingo de Ramos y concluirá el Miércoles Santo, por lo que son todos ellos días laborables. Supongo que pedirán vacaciones porque no siempre se tiene la suerte de vivir junto a tu hijo esta experiencia, y me consta que los acompañarán igual que los están acompañando con los entrenamientos de la selección cordobesa.

P. Quien sí está acostumbrado a estos desplazamientos eres precisamente tú, que tienes una buena carga en la mochila tras la participación, por ejemplo, en el Campeonato Jamboree de Santiago de Compostela…  

R. La verdad es que dentro del trabajo que realizamos a lo largo del año, como entrenador, siempre me marco que podamos conseguir participar de retos bonitos y motivantes para nuestros chavales tanto en el terreno personal como en el deportivo. Como bien dices, el año pasado asistimos a un torneo a nivel nacional en Santiago de Compostela, lo que supuso como un gran premio a la gran temporada que habían realizado, ya que sólo nos separaron tres puntos de diferencia en un basket average, de la posibilidad de estar en la Final Four. Tras ese pequeño golpe moral, decidimos que no podía quedarse la temporada ahí, y aunque yo fui el promotor de la idea, fue el apoyo de los padres, gran motor en ese aspecto, en los desplazamientos y en muchos otros, el que nos permitió vivir esa gran experiencia de la que guardamos muy gratos recuerdos.

P. ¿Hay alguna experiencia de este tipo preparada para este año?

R. Bueno, en principio ya, la segura, segura, es una Fase Final que jugaremos gracias a que ganamos la Copa COVAP con bastante solvencia, y en la que nos enfrentaremos a los siete mejores equipos de Andalucía que, a su vez, saldrán de las distintas fases provinciales. Esta Fase Final tendrá lugar en Junio cuando hayan concluido todas las competiciones provinciales y es lo único que, con seguridad podemos adelantar, porque el otro objetivo, que es el de clasificarnos para un sector de Andalucía, nos lo tenemos que ganar aún. Es cierto que lo tenemos bien encarrilado pero tienen que darse todas las circunstancias positivas que se vienen dando hasta ahora y no sufrir ningún tipo de percance por el camino. Me quedo con el trabajo día a día, que es lo que va haciéndonos más fuertes, sin marcarnos metas lejanas que sólo llegarán si seguimos trabajando como hasta ahora.

P. Dentro de ese trabajo que tú realizas como entrenador, ¿qué es lo que más te llena personalmente?

R. Si lugar a dudas, el cariño y afecto que recibo de los niños, ya que es algo muy difícil de describir; de hecho, yo hace cuatro años llegué al club sin haber entrenado niños pequeños, sino en edades junior o superiores, y sin lugar a dudas, el cariño que recibes de los niños de estas edades, con el respeto que te miran, la luz que ves en sus caras cuando les hablas… es algo que no se paga con dinero. Es eso lo que más me ha motivado para seguir formándome al mismo tiempo que les entreno.

P. Hablando de formación, ¿qué valoración podrías hacer del curso que realizasteis dedicado a la formación de monitores de baloncesto?

R. La valoración que cabe hacer es excelente tanto a nivel de participación como de nivel de conocimientos de los participantes, ya que la práctica totalidad lo superaron sin tener que presentar ningún trabajo adicional. Estamos muy contentos porque llevábamos bastante tiempo a la federación la organización en Cabra de este tipo de cursos formativos, puesto que como bien sabes, estamos en el club muy pocos entrenadores para el volumen de equipos que tenemos en competición. En este sentido, estamos muy saturados y necesitábamos el desarrollo de este curso para descargar un poco a los entrenadores que ejercemos actualmente, y renovar el club en cuanto a la figura del entrenador.

P. Una de los aspectos en los que me consta que queréis mejorar también es en el acercamiento de las niñas al club, para lo que incluso habéis hecho una captación…

R. Así es. Este hecho viene causado por la gran oferta deportiva que tenemos en Cabra en cuanto a deporte femenino, y nos ha llevado a sufrir un parón en algunas edades, y si bien es cierto que, desde que comenzamos nuestra andadura hemos experimentado muchos éxitos y muchas alegrías en la categoría femenina, no tenemos el número que nos gustaría de chicas practicando baloncesto, por lo que tomamos la determinación de hacer una captación a nivel local de cara a ampliar el número de jugadoras. Empezamos en edad peque con una sola niña, y de momento ya tenemos nueve, por lo que en estas edades y en las superiores a los once años, nos damos por satisfechos, pero entre los ocho y los once años tenemos un pequeño déficit de jugadoras que esperamos poder solucionar.

P. Para terminar, ¿esperabais el éxito que ha tenido el álbum de cromos?

R. Bueno, la verdad es que teníamos muchas expectativas puestas cuando planteamos la iniciativa a principio de temporada, pero hasta que no te pones no sabes los buenos ratos que puede llegar a darte. No es algo que económicamente nos aporte mucho dinero, pero sí que es muy bonito ver a los niños cambiar cromos entre ellos sean de la categoría que sean, o que en la misma presentación del club, los niños pequeños fueran a darle a los grandes sus cromos. Es una más de las vivencias que estamos experimentando dentro del club, y que más que el beneficio económico, busca un beneficio en el aspecto vivencial, en el aspecto del compañerismo y del buen trato de unos para con otros, que es lo que se busca con este tipo de iniciativas.

P. ¿Deseas añadir algo más?

R. Poco más, sólo daros las gracias porque sabemos que siempre estáis pendientes de todo lo que se hace en nuestro club, y transmitirle al pueblo de Cabra que los sábados y los domingos tienen en el Pabellón baloncesto de un altísimo nivel sin necesidad de verlo por televisión.